Una mujer maravillosa, muchas veces

Uno de los personajes de ficción más interesantes, y que peor trato han recibido en los últimos años por la editorial americana que lo publica desde los años 40, es Wonder Woman. Una mujer poderosa, con un origen mitológico, con unas habilidades extraordinarias, con un lazo que obliga a quien es sujetado por él a decir la verdad... no puedo sino ser una amenaza para una cultura radicalmente machista como la de los cómics, en la que las mujeres con personalidad suelen usarse como contrapeso de personajes masculinos pusilánimes o como meros objetos de deseo sexual.

No es extraño, siendo como es un icono femenino, que entre las muchas imágenes que se presentaron a un curioso concurso sobre el vestuario de Wonder Woman, haya tantas realizadas por mujeres, o incluso niñas por lo que se adivina en el trazo. Lo que sí resulta peculiar es que algunas de las imágenes más sexualmente poderosas hayan sido creadas por mujeres, ofreciendo una imagen del personaje alejada de lo que uno se imagina que la ven las mujeres.

Como por ejemplo, la de aquí al lado.

Héroe definido

Literalmente.

Héroe:

La veneración y el respeto a los héroes se cuentan entre las tradiciones más antiguas de la Humanidad. Los primeros ejemplares del homo sapiens temían y respetaban a los más fuertes y a los más ancianos, que en aquella época podían llegar a los treinta años. Los pueblos prehistóricos indoeuropeos llamaban seros a aquellos que les daban protección.

Mil años después, surgió entre los aedos griegos –los cantores de hazañas épicas como tal vez fuera Homero– la figura mítica del héroe, un personaje generalmente emparentado con los dioses, como Aquiles o Eneas, que llamaron heros. La palabra fue adoptada en latín por Virgilio como hçrôs, con la denotación de un semidiós, hijo de un mortal con una diosa, pero Cicerón aplicó el vocablo a los hombres célebres de su tiempo.

El español heredó la palabra latina, que aparece por primera vez en nuestra lengua en el Vocabulario de Alonso de Palencia (1490) como heroes, definidos como "fuertes varones" o heroas ("medio dios segund que tenian opinión de los heroas"). La palabra se tildó durante mucho tiempo como heróe, incluso en la primera edición del Diccionario de la Academia, pero la acentuación actual fue seguida por Góngora y Lope de Vega. Este último fue el primero que habló en castellano de heroína, una palabra que ya había sido empleada en latín por Ovidio, aunque referida apenas a la mujer o la hija de un héroe. La primera heroína por sus propios méritos de la historia tal vez haya sido Juana de Arco, aunque los ingleses no lo crean así (Ver también heroína).

Hoy en día las cosas han cambiado. Los héroes del siglo XXI son más bien los jugadores de fútbol, –seguidos por miles de personas en las canchas de fútbol y por millones en la televisión–, los actores y actrices de cine y algunos líderes políticos. O los ‘superhéroes’ personajes de ficción de poderes sobrenaturales divulgados en las tiras cómicas y en la televisión.

Sigo soñando

Television is dying / La televisión se muere

Lo dice Damon Lindelof en The New York Times, en un artículo a propósito de la huelga de guionistas audiovisuales en Estados Unidos.

TELEVISION is dying.

I should have realized this four years ago when I first got my TiVo box, but denial is always the first stage of grief. I simply couldn’t acknowledge that this wonderful invention heralded the beginning of the end.

TiVo stores your favorite movies and shows on its hard drive, allowing you to pull up last night’s episode of “The Daily Show” as easily as you click open documents on your laptop. In fact, once you download the original broadcast — sorry, I meant to say “record” it — you can watch it at your leisure. The next morning. Next year. Your call. Because now? You own that episode.

Best of all, you got it free.

Sigue más, mucho más...

Me gusta el rojo

Porque los mejores están para leerlos, y a diario si puede ser. Así que me paso por el sitio de Tom Spurgeon, que es una referencia, y miro cuáles son las novedades en la parte más seria, adulta y trascendente del mundo yanqui de los tebeos.

Sobre todo porque es uno de los pocos sitios en los que encuentras referencias a los autores de viñetas de prensa, ese mundo que algún día habrá que recorrer con la lupa para no perderse nada.

Y encuentras lo que publica la revista que debería leer semanalmente si no tuviera mil millones más de cosas que hacer, New Yorker, bandera de la ilustración artística. Y no puedes sino rendirte ante la maestría de quienes allí dejan caer su arte. Como por ejemplo este tributo al rojo.

Una brújula cinematográfica

Vale, es una película para niños, pero me apetece mucho verla. No, por el cartel no, que en verdad no es el más conseguido del siglo y la frasecilla con la que comienzas a leerlo tiene delito. Pero miro y remiro el trailer de La Brújula Dorada y no hace sino aumentar mi interés por ver cómo se resuelve la acción, aunque ya sé que se trata una nueva trilogía. Tal vez sea mejor, así lo disfrutaremos con la cadencia que parece que merece.

Canete es un artista

En grande luce mucho mejor el trabajo del señor Eric Canete.

Lo intentaré

Es, o mejor dicho será, un reto. Hacer un puzzle, algo que me tenía entretenido cuando era más chiquillo y que tengo muy aparcado. La ocasión lo merece, ya que si consiguiera culminar este reto, el premio es millonario. Y no es coña, lo dicen los que lo venden. Así que igual me lanzo a la aventura. Eso sí, tendré que hacer acopio de paciencia, y no sé yo si es el mejor momento para intentarlo...

El mejor invento del año

Por si alguien lo dudaba.

Hoy no me quiero

Sin razón aparente u oculta, hoy no me quiero.
Sin motivo y sin explicación, es un día en el que no me gusta ser yo.
No está gris el día, no he perdido nada ni me han dejado ni me han rechazado. Las razones no están fuera, sino dentro.
Hoy no soy como me gustaría ser.
Hoy no me encuentro a gusto, y no creo que nadie lo pueda estar a mi lado.
Hoy tengo ganas de llorar, pero no lo hago.
Que acabe pronto.

Incontables estrellas

En noches como esta, te quedas con la boca abierta mirando hacia arriba. Si no hay más remedio, tendremos que irnos hasta Texas para disfrutar del espectácaulo nocturno retratado por Larry Landolfi e intentar imitarle, capturando un momento tan mágico y arrebatadoramente hermoso.