No dudes que te quiero. Creo que eso no se puede discutir.
Pero hay varias razones por las que tú y yo no podemos estar juntos.
En primer lugar, porque tú ya tienes un novio. No, no me digas que soy tradicional ni nada por el estilo. Tienes un compromiso, y eso es algo que yo ni quiero ni puedo romper. Si llega el momento de acabar esa relación, serás tú y serán tus razones las que lo hagan; no yo.
En segundo lugar, yo estaré aquí mucho tiempo. Vivo aquí, tengo mi casa y mi familia, mis amigos. Nó se cuánto aguantaré, y puede que algún día me marche, pero no va a ser ahora. Y tú estás de paso; tu presencia es circunstancial, lo sabes; cuando acabe el año volverás a tu ciudad, porque habrás acabado lo que estás haciendo aquí.
Sabes que no quiero tener una relación estable. Ya he salido de varias, bien o mal, eso da igual, y en estos momentos no quiero volver a liarme. No tan pronto. No de esta manera.
La diferencia de edad es mucha, y ya sé que te parece una tontería porque tenemos gustos muy similares, frecuentamos los mismos ambientes, tenemos amigos comunes... Pero nuestro momento es diferente. No quiero ser un freno. Sé que tal vez sea un error; probablemente, pero el miedo es muy grande.
Y por último, y sabes que es casual que lo haya omitido hasta este momento, que no me importa y que, por mucho que tú intentes convencerme de otra cosa, no soy como tú.
Tú eres gay.
viernes, diciembre 24, 2004
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